En la sesión testaremos con la verificación muscular o test kinesiológico, si la persona con la que el cliente siente que tiene que desengancharse energéticamente es la adecuada y si, además, es el momento adecuado.
Una vez que hayamos identificado a la persona y estemos seguros de que es el momento adecuado para realizar el trabajo, procederemos a identificar y liberar las emociones bloqueadas con respecto a esa persona.
Posteriormente realizaremos el corte de lazo energético que normalmente se sitúa en el ombligo y luego procederemos a cerrar y sellar el aura con energía lemniscata y frecuencia vibratoria adecuada de luz y sonido para evitar cualquier fuga energética.
Si fuese necesario, se cierra la sesión con un protocolo para eliminar la energía de traumatismo que haya podido crear el lazo energético.
Aun en el caso de que el cliente quisiese realizar otros cortes energéticos con otras personas, se testará el tiempo conveniente que tiene que transcurrir entre la terapia que se acaba de realizar y la siguiente.