El 21 de diciembre marca el día del solsticio de invierno que es cuando nuestro planeta Tierra esta lo más alejado posible del influjo del Sol.
Es la noche más larga del año y el punto de máxima oscuridad pero energéticamente es cuando la Tierra se prepara para recibir las máximas energías de luz y por tanto, de amor.
Este proceso tiene una duración de varios días, siendo su punto de partida el solsticio del día 21 y su máximo apogeo entre el 24 y 25 de diciembre. Yo recomiendo que sean unos días de interiorización, de amabilidad, de entrega, de servicio, de empatía, de cariño, de alegría, de humor, de amor y de muchas cosas más primero con uno mismo, y luego con los demás.
Permite que estas energías que entran en nuestro planeta, también penetren en ti. Es el momento de realizar las peticiones para todo el año y sugiero que empecemos a pedir por la integración de cualidades positivas en nosotros en vez de pedir cosas materiales.
Pidamos para que se incorporen en nosotros todas esas cualidades que nos ayudaran a manejar mejor nuestra vida como son la compasión, el dialogo, la comunicación, la amistad, la dulzura, de….
Puestos a pedir, pide todos esos atributos que ves y admiras en los demás y no reconoces que tu ya los tienes, para que se consoliden dentro de ti para tu mayor bien y más altos fines y se beneficien todos los involucrados.
Haz un firme propósito para pasar estos días fluyendo con esta energía que no es otra que la del amor.