Científicamente está comprobado que necesitamos 21 días para modificar o cambiar un habito o creencia.
También está comprobado que para que una idea se convierta en algo físico, tangible, primero tenemos que haber tenido la idea, haberla imaginado y luego haberla sentido y emocionado con ella.
Pues bien, si cogemos una idea, la damos forma, la vivimos imaginariamente, la envolvemos con las emociones que tendríamos si ya fuese realidad y durante 21 días reforzamos la idea con una frase que resuma y afirme nuestro objetivo, debemos de ver hecho realidad nuestro cambio de habito, creencia o proyecto.
Pero siempre y cuando no existe ninguna duda en nuestro subconsciente, pues si no el cerebro lo interpreta como una negación y no se pone a trabajar para conseguir su materialización.
En mi curso, vamos a aprender cómo funciona la Ley de Manifestación y como construir afirmaciones adecuadas para poder ir cambiando nuestros hábitos y creencias y que nuestra vida se transforme en aquello que deseamos.